Los clientes votan
todos los d�as con sus pies y su palabra, con sus d�lares y su
lealtad, por el comercio que mejor los atiende. Son los clientes,
mayormente, los que determinan si una compa��a puede hacer
negocios. Y los clientes siempre est�n cambiando. Existe un dicho
muy com�n que dice que la ganancia depende de conocer qui�nes son
los clientes, averiguar exactamente qu� es lo que quieren o lo que
querr�n en un futuro cercano, y d�rselo. Los cambios en las
necesidades del cliente y en su variabilidad han provocado numerosos
paradigmas de ganancia, nuevos en el pasado, y continuar�n
definiendo oportunidades en cada negocio e industria.
La rentabilidad se basa
en la gente, y como ustedes saben, unas pocas personas son m�s
importantes con respecto a las ganancias que la mayor�a en una
compa��a. Las ganancias altas dependen de unos pocos talentos
clave en una organizaci�n. Piensen en los brillantes directores
generales y gerentes de marca de Nike y Starbucks, o los gerentes de
proyecto de Merck, Boeing, y General Electric, los expertos en
tecnolog�a de informaci�n de Cemex, o aquellos que producen las
pel�culas de Walt Disney. Piensen en los m�s brillantes escritores
de material publicitario de una agencia de publicidad, o en los
genios dise�adores del Volkswagen Beetle, la nueva computadora
Apple o las m�quinas de afeitar Gillette. En muchos casos son un pu�ado
de jugadores en una vasta organizaci�n los verdaderos catalizadores
de la rentabilidad y la creaci�n de valor.
Aqu� hay otra manera
de pensar. Imaginen a Microsoft con sus treinta talentos clave.
Ahora piensen en la misma compa��a con los mismos 28 billones de d�lares
en ganancias. Pero ahora, a trav�s de reestructuraci�n, reingenier�a,
reducci�n de plantilla, �rightsizing� y reducci�n de costos y
una inhabilidad para retener el talento, la mayor�a de los expertos
en ganar dinero se fueron. La comparaci�n del antes y el despu�s
puede ofrecer realmente una imagen espantosa, particularmente si
usted invirti� en la compa��a.
De acuerdo con Jim
Collins, autor del libro Good to Great, los grandes l�deres tienen
una ambici�n por la compa��a, no por ego, sino que est�n
motivados para constru�r, crear, contribu�r, autorizar, y
transformar. Son grandes organizadores de equipos, que ponen a la
gente que corresponde en el �mnibus en el asiento correcto, donde
gente correcta equivale a car�cter (valores interiores), que es m�s
importante que estudios cursados, habilidades pr�cticas,
conocimiento especializado o experiencia laboral. Son capaces de
confrontar hechos brutales de su actual realidad y son receptivos a
la retroalimentaci�n. Tienen una fe inquebrantable en ellos mismos
y est�n disciplinados como personas capaces de tener buenas ideas y
llevarlas a la pr�ctica desarrollando una cultura de la disciplina.
Usan la tecnolog�a selectivamente, la adaptan a su creatividad y,
frecuentemente, usan la frase �buena suerte� para explicar su �xito
y est�n alerta a informaci�n que no puede ser ignorada, �son
conscientes!
El l�der del futuro
deber� reconocer las necesidades para la supervivencia o la
seguridad, para los logros y �xito, la necesidad de pertenecer, de
autoestima, creatividad e innovaci�n; en pocas palabras las m�s
altas necesidades de la especie humana formuladas primeramente por
Abraham Maslow. Tambi�n deben conocer las respuestas a esas
necesidades, tales como pelea/vuelo, ego, introspecci�n, intuici�n,
y la respuesta creativa. Existen muchas clases de l�deres de
negocios; est� Bill Gates, por ejemplo, cuya cultura es el
resultado de la ecuaci�n: �xito + ambici�n, + competencia, +
orden y jerarqu�a. Y est�n aquellos en cuyo liderazgo se ha
confiado pero terminaron en un completo ego�smo, codicia, y
corrupci�n.
Si tuvi�semos que
pensar en l�deres como Jack Welch, estar�amos hablando de una
clase de l�der diferente de Henry Ford, Andrew Carnegie o Bill
Gates, Welch era un l�der de equipo. Esta clase de liderazgo
responde a la necesidad de pertenecer, �l vivi� en una cultura de
mentalidad abierta e imparcialidad, que se esfuerza por ser justa.
El futuro ser� de l�deres
de negocios que puedan responder a la necesidad de la expresi�n
creativa y de la renovaci�n mediante innovaci�n continua, y cuya
cultura sea de correr riesgos, de vanguardia, progresista, de ideas
de dise�o, exploratoria, de sondeo, y de rotura de l�mites. Ser�
tambi�n de l�deres que tengan sentido de la �tica.
Inversionistas,
clientes y empleados estar�n cada vez m�s interesados en el
sentido de la �tica de una compa��a; las ganancias de una empresa
deben ser reales y no de dos clases, una para la declaraci�n de
impuestos y la otra para inflar el precio de las acciones. La imagen
del director general ha sido da�ada por irregularidades contables y
mal uso del dinero de los inversores. Habr� un nuevo enfoque en
verdadera capacidad empresarial que se basa en la �tica del negocio
y en cierta frugalidad, en la responsabilidad de la direcci�n con
respecto a todos los empleados y sus familias, y con respecto a la
econom�a y al ecosistema.
Este art�culo trata de
la ley universal de negocios. He aqu� otra ecuaci�n: retorno
equivale a margen multiplicado por velocidad de activos. Esto
puede parecer una f�rmula unificadora, pero no lo es, no puede ser
tan simple. La ley nos ayudar� a entender el esqueleto b�sico, por
as� llamarlo, para la rentabilidad y el retorno, pero no se puede
explicar por completo el fen�meno cada vez m�s complicado de la
rentabilidad. Seamos cardi�logos, neur�logos o grandes
entrenadores de f�tbol, debemos aprender acerca de nuevos
paradigmas, nuevos patrones, modelos de ganancia viejos y nuevos,
para interpretar el campo de los negocios de hoy con exactitud y
para administrar nuestras compa��as rentablemente.
La rentabilidad es un
juego de mente, una manera de pensar �nica. As� como la f�sica
nos habla de la energ�a f�sica, y tampoco hay una teor�a
unificadora, la rentabilidad nos habla de la energ�a financiera.
Ninguna ganancia se traduce en falta de energ�a, sin ella no
podemos continuar lo que estamos haciendo o lo que m�s nos gusta, a
decir verdad, no tenemos manera de construir el futuro.
En su libro The Art of
Profitability, Adrian Slywotzky menciona a Ohno en Toyota, quien una
vez dijo: �Preg�ntese �por qu�? cinco veces. A la quinta, usted
comenzar� a acercarse a la contestaci�n correcta. Y Slywotzky dice
que para encontrar una respuesta acerca de rentabilidad hay que
seguir haciendo las preguntas correctas. Cuando leemos los primeros
casos pr�cticos necesitamos acercarnos juguetonamente. Deber�amos
preguntarnos c�mo se produce la ganancia con esas compa��as, lo
mismo que resolver un rompecabezas. Esto abrir� nuestras mentes a
nuevas posibilidades. Nos conducir� a una nueva manera de mirar
nuestro negocio, y descubrir nuevas oportunidades de ganancia donde
otros s�lo ven un mercado maduro o caos.
(Dos arist�cratas est�n
montando a caballo y uno desaf�a al otro para ver cu�l puede dar
el n�mero m�s grande. El otro est� de acuerdo, se concentra por
algunos minutos, y orgullosamente dice, �Tres�. El que inici�
el juego se queda media hora sin decir nada, y finalmente se encoge
de hombros y reconoce la derrota. )
El matem�tico griego
Arqu�medes dijo que cualquier n�mero, no importa cuan grande,
puede ser, excedido al sumar muchas veces cualquier n�mero m�s
peque�o, no importa cu�nto. Esta perspicacia deriv� en el famoso
pronunciamiento de Arqu�medes de que con una palanca lo
suficientemente larga, y un lugar para estar de pie, �l solo pod�a
f�sicamente levantar la tierra. Esta clase de idea la vemos con el
actor Tom Cruise que ha hecho muchas menos pel�culas que Robert
Redford, por ejemplo, pero tiene un activo neto 10 veces mayor que
el �ltimo. �Por qu�? Pues porque Cruise o su administrador,
entendieron que un peque�o porcentaje del total de las ventas de
boleter�a sumar�a mucho m�s; en su caso, m�s de 400 millones de
d�lares.
Recordemos que las pir�mides
de Egipto fueron construidas con una piedra a la vez. Simple: suma,
resta, divisi�n y multiplicaci�n nos traer�n m�s cerca de
entender c�mo la ganancia se produce. Pero reconozcamos que la
mayor�a de nosotros no es tan competente en aritm�tica como lo es
en la literatura. F�cilmente decimos que matem�tica era nuestra
peor asignatura, o que uno mismo no puede organizar su chequera, y
es socialmente m�s aceptable que decir que jam�s ha le�do un
libro en su vida.
A pesar de que los
cambios en las condiciones de mercado son las �nicas fuentes de
innovaci�n para una mayor rentabilidad, existe una f�rmula en
negocios que no cambia, y sorpresivamente, es conocida y practicada
por minoristas peque�os y directores generales de renombre como
Jack Welch , o Michael Dell.
La f�rmula fundamental
para cualquier negocio es R = M x V (retorno es igual a
margen de ganancia multiplicado por velocidad de activos). Walt
Disney, Richard Branson, Liz Claiborne, y muchos m�s, cuando
comenzaron no pod�an leer un balance pero conoc�an las
interioridades del negocio intuitivamente, y el potencial de sus
activos con respecto a generaci�n de ganancia. Despu�s de todo,
sus activos m�s importantes hubieran sido apenas reconocidos por
sus contadores, ya que los personajes animados de Disney, la misi�n
sin igual de Branson de valor-por-dinero, entretenimiento y diversi�n,
o la anticipaci�n temprana de Claiborne de la necesidad de una
nueva categor�a de ropa para mujeres en la Am�rica corporativa no
se descubren en libros financieros.
Un l�der de negocios
listo sabe que con un buen dise�o de negocios no s�lo obtiene una
gran ganancia con alto margen, sino que adem�s tiene varios modelos
de negocios, incluyendo nuevos que se refuerzan uno a otro
mutuamente y, lo m�s importante, existen muchas maneras para
incrementar retornos simult�neamente. El o ella se enfocar� de una
manera u otra, pero siempre mantiene en mente todos los elementos de
la ecuaci�n del retorno.
Nuevos patrones de
ganancia, un acercamiento desde �afuera hacia dentro� a la
estrategia y un modo de pensar que va �desde el futuro hacia el
presente� nos permitir� responder rentablemente a cambios en las
condiciones de mercado. Reconocer patrones, cambiar nuestro
acercamiento estrat�gico y nuestro modo de pensar nos ayudar� a
identificar nuevas maneras para incrementar m�rgenes de ganancia,
incrementar el precio y bajar los costos de las ventas, a�n
multiplicar las ventas econ�micamente, y otro elemento tan a menudo
ignorado por empresarios y ejecutivos por igual: hacer m�s con los
mismos o a�n m�s livianos activos.
(De un frasco lleno de
pulgas delante de �l, el c�lebre experimentador Van Dumholtz saca
una pulga, con no menos cuidado corta sus patas traseras, y en voz
alta le ordena que salte. Se da cuenta que no se mueve e intenta la
misma cosa con otra pulga. Cuando termina, hace estad�sticas y
llega a la conclusi�n, con certeza, de que los o�dos de una pulga
est�n en las patas de atr�s. )
Los conceptos s�lo
pueden ser entendidos correctamente cuando est�n relacionados con
categor�as principales de idea. Para comprender como se produce la
ganancia necesitamos aprender a pensar a trav�s de las l�neas de
correlatividad, prop�sito y centralidad, y finalmente acerca de n�meros
y principios. Los elementos correlativos dentro de un negocio, pero
tambi�n en relaci�n con clientes, proveedores, competidores,
inversionistas, etc., determinan su rentabilidad. Sin correlatividad
(interna y externa) ning�n negocio puede existir, ni siquiera
desarrollarse.
Adem�s, los elementos
correlativos de sujeto y objeto siempre poseen un prop�sito com�n
y desarrollan acci�n de dar y recibir, centr�ndose en ese prop�sito.
Ese prop�sito, en negocios, es tan simple como lo siguiente: el
prop�sito de cualquier negocio es ganancia. Eso no significa
que los empresarios van a hacer negocios s�lo por la ganancia,
tienen toda clase de razones, y una de ellas es el dinero, pero
saben que s�lo pueden hacer lo que quieren hacer por un per�odo de
tiempo extenso si su negocio es rentable, o que pueden hacer mas de
lo que realmente quieren hacer si su negocio les permite ser
superiormente rentables. Dinero equivale a oportunidad. Si la gente
hiciera cosas s�lo por el dinero, habr�a mucha m�s competencia en
control de desechos o negocios de funerarias, los vendedores se
jactar�an m�s a menudo de los contratos de mantenimiento de la
higiene p�blica que de haber vendido Jaguars o diamantes.
El prop�sito de los
negocios es obtener una ganancia, y esta tiene que ser manejada de
una manera centrada en el cliente y en la ganancia en s�. Tambi�n
cuenta la rentabilidad superior. Por qu� conformarse con menos, si
la ganancia s�lo depende de la manera sin igual, diferente, y
original con que usamos nuestras mentes. Los negocios est�n llenos
de paradojas; una de ellas es que uniformemente valoramos alto lo
que pagamos, como plantas, m�quinas, o terrenos, pero lo que se nos
da gratis, como nuestras mentes, tiene un valor infinito.
Las capacidades de un
pensamiento empresarial verdadero son los factores fundamentales del
�xito, y eso es muy dif�cil de cuantificar en nuestros informes
financieros, un sistema de contabilidad de m�s de 400 a�os. Es
como Newton y la f�sica cu�ntica, la ley de gravedad todav�a es v�lida,
- m�s trate de saltar del tercer piso-, pero esa ley s�lo explica
una parte insuficiente de la realidad y necesita ser completada por
los nuevos principios de la f�sica moderna. Igual, los factores
clave para el �xito de hoy son m�s complejos que nunca y est�n
relacionados mucho m�s que hace unas d�cadas con activos
intangibles.
Tangible e intangible
es otra categor�a importante en negocios para que entendamos c�mo
la ganancia realmente se produce. El secreto para conseguir una
rentabilidad superior y un crecimiento del valor astron�mico est�
primeramente dentro de los activos intangibles. Primeramente, porque
los activos siempre vienen de manera doble, es como la mente y el
cuerpo de una persona. De manera semejante, los activos tangibles e
intangibles no pueden ser separados en negocios, y los primeros son
m�s importantes con respecto a rentabilidad, ya que siempre ser�
�la mente� del negocio la que lo lleva al �xito, como por
ejemplo anticipaci�n estrat�gica con respecto a nuevos paradigmas,
talento, pasi�n, imagen, y todos los otros factores invisibles del
�xito que no est�n nombrados en el balance.
(El matem�tico G. H.
Hardy estaba visitando a su protegido, el matem�tico indio
Ramanujan, en el hospital. Para hablar de algo, remarc� que 1729,
el n�mero del taxi que lo hab�a tra�do, era un n�mero bastante
aburrido, a lo que Ramanujan respondi� inmediatamente, ��No,
Hardy! �No,Hardy! Es un n�mero muy interesante. Es el n�mero m�s
peque�o expresable como la suma de dos cubos en dos diferentes
maneras.�)
La facilidad de la
gente para manejar n�meros va desde el arist�crata en el comienzo
de este tema a Ramanujian, pero, sabemos que los n�meros son
importantes, ya que apuntan a los principios. Debemos comprender c�mo
se produce la ganancia en una compa��a, no importa si trabajamos
en �marketing�, contabilidad, finanzas, o producci�n. Cuantas m�s
personas sepan c�mo una compa��a obtiene ganancia, mejores
estrategias pueden ser comunicadas, m�s personas est�n en la misma
p�gina, y m�s coherentemente las secciones de la compa��a
trabajar�n juntas, de tal manera que se cree sinergia verdadera. Un
ejemplo: 1 + 1 + 1 equivale a 10.
Por eso necesitamos dominar algunas razones, a
fin de familiarizarnos con el arte de la rentabilidad; necesitamos,
primero, darle sentido a la jungla de la raz�n financiera, no hay
otra manera. La f�rmula fundamental para cualquier negocio es la f�rmula
del retorno que consiste en dos razones que est�n multiplicadas; R
= M x V; adonde la R significa retorno a los activos, M es
margen de ganancia (ingreso dividido ventas) y V es velocidad
(ventas dividido activos). Dise�os de negocios con buenos modelos
de ganancias son liderados por empresarios que han dominado esta f�rmula
fundamental: la importancia de los clientes y saber c�mo atraer los
mejores talentos.
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